Benamaurel: nuestro pueblo
Sobre Benamaurel...
Benamaurel es un municipio español perteneciente a la provincia de Granada, en la comunidad autónoma de Andalucía. Está situado al nordeste de la provincia, en la comarca de Baza. Cuenta con una población de 2.458 habitantes (INE 2010) y una extensión de 127 Km². Dista 121 Km. de la capital granadina.
Situado en el centro de la Hoya de Baza, su altitud es de 719 m. sobre el nivel del mar, y se encuentra rodeado por los parques naturales de Sierra de Baza y Sierra de Castril, además de por el Cerro Jabalcón y el embalse del Negratín.
El municipio de Benamaurel está formado por una llanura de secano surcada por los valles de los ríos Guardal, Castril (que lo delimita al oeste), Cúllar, y Baza (que lo delimita al suroeste). De ellos el más importante es el valle del río Guardal, que atraviesa todos los núcleos de población del municipio y al que van a parar los afluentes citados.
Benamaurel está constituído por los siguientes barrios: Alhanda, Almacil Alto, Almacil Bajo, Cuesta del Río, Fuerte, Sacristía, San Antonio, Virgen de la Cabeza, Yeseras y Calderón de la Barca.
Tras la gran importancia que en el pasado tuvieron la producción de esparto (llamado por entonces "oro verde") y la explotación de minas de azufre, hoy la principal base económica de Benamaurel es la agricultura tradicional del olivar, los cereales y los cultivos de regadío. En la actualidad, gracias a los nuevos riegos del Canal de Jabalcón, están apareciendo cultivos de regadío intensivos de alta productividad.
Su historia...
Benamaurel viene de la palabra "Aben Moriel", que significa "Descendientes de Moriel", y aunque se menciona a los descendientes de Moriel ligados a la ciudad en el siglo XVIII, todavía se desconocen los datos y genealogía de este hombre.
Debido a su estratégica situación junto al río Guardal y sus afluentes, y a las peculiaridades geológicas de su terreno que facilita la construcción de viviendas trogloditas (casas-cueva) excepcionalmente estables, los orígenes del asentamiento de población de Benamaurel pueden datarse en tiempos prehistóricos.
Por tierras de Benamaurel han dejado su huella civilizaciones diversas: la Cultura de El Argar, los íberos, los romanos (por aquí pasaba la Vía Augusta), los visigodos y los árabes.
Del siglo XII datan gran cantidad de cuevas almohades, época en que a Benamaurel la cita Abi Mohamed ben Rozac en sus escritos. En el s.XIII se alzó un castillo defensivo frente a las tropas de Fernando III (aunque fue destruído por un gran terremoto en 1531). Durante el s.XIV alternó varias veces entre manos árabes y cristianas, hasta caer definitivamente en las de estos últimos en 1488 (aunque aún hubieron de afrontar una rebelión al año siguiente). Tras la explusión de los moriscos estas tierras quedaron casi despobladas.
Después dependió de Baza, se separó de nuevo en 1628 y fue vendida al Duque de Alba en 1633. Durante la invasión napoleónica sus vecinos jugaron un papel decisivo al ayudar al general O`Donnell y negar la pólvora de sus fábricas a los franceses. También se vio afectada por las Guerras Carlistas.
Sus fiestas...
Desde el último domingo de abril (y sábado anterior), hasta el martes siguiente, Benamaurel nos invita a su gran celebración: las Fiestas de Moros y Cristianos, que reúnen a miles de personas en torno a la Virgen de la Cabeza, su patrona. Durante estos días en Benamaurel se abre una puerta en el tiempo que nos permite revivir las viejas gestas épicas entre andalusíes y cristianos. Esta centenaria celebración, basada en una obra en verso del Siglo de Oro que entronca con los autos medievales, ha sido descrita como "la fiesta de Moros y Cristianos de mayor contenido literario de cuantas se celebran en España" (Muñoz Renedo, C.). Las representacions en directo y en plena calle a cargo de actores aficionados del propio pueblo hacen que la fiesta religiosa y la animación popular se entremezclen de forma vistosa y espectacular.
También en abril tienen lugar las fiestas de San León Magno, patrón de Benamaurel. Transcurren el fin de semana más cercano al día 11 en honor al Papa San León Magno. Ese día se reparten rocas de pan entre todos los asistentes. La imagen del santo es conducida a su ermita por la mañana, regresando por la tarde al templo parroquial.